viernes, 22 de mayo de 2015

Silencios


Tampoco me importa el mío
Nada que hacer, hay veces que vuelvo al pasado, sobre todo cuando el presente se pone difícil...
Está enrarecido el ambiente social, con tanta campaña, tanta mala onda, tanto desprestigiar al adversario, lo que me hace suponer que no hay proyectos sustentables para ofrecer a la ciudadanía. Pareciera ser que en esta sociedad, cualquiera cree que puede tener un cargo político, aún a pesar de que más de uno o una no pueden expresar una idea completa. ¡Se nota cuando aprenden un "discurso" y van detrás de él como burro de una zanahoria!
Tanto así que una de las candidatas a gobernadora se niega a debatir sus proyectos para aplicar en caso de ganar la gobernación.Y lo peor es que hace agua cuando quiere justificar el porqué no presentarse a debatir...
La realidad es que ofrecer, todos y todas ofrecen, pero casi nadie dice con que fondos llevarán adelante esos proyectos, cómo los harán sustentables en el tiempo, que problemas pueden surgir en el medio, que recursos necesitarán etc etc.
¿Y qué tiene que ver esto con el pasado reciente? hasta hace una veintena de años (apenas un poco más) no elegíamos gobernador, lo mandaba directamente el presidente, pues éramos Territorio Nacional.
¡Cómo me gustaría hoy que alguien externo decida quien gobernará Tierra del Fuego! 
Recuerdo cuando caminaba por las calles, llovía y alguien detenía su coche (humilde) para ofrecer llevarme hasta mi casa porque, decían:"Usted es la maestra del Barquito Travieso" Si señores, señoras y señoritas, así fuimos alguna vez respetados los docentes, en ese pasado no tan lejano.
Hoy el paisaje circundante sigue siendo encantador, y sigo teniendo la posibilidad de adentrarme en el bosque y olvidarme de la sociedad que me rodea.
Gente absolutamente irrespetuosa, que no acepta la diversidad, que no puede consensuar, que sólo su opinión cuenta y etc etc. No todos, claro, pero cada vez hay más gente así, y algunos y algunas de los/las que se candidatean a cargos políticos pertenecen a ese subgrupo de gentes que solo les interesa su bienestar personal y en lo absoluto mejorar las condiciones para la sociedad fueguina en su conjunto. Y los docentes, en general también, nunca hablo de totalidad, pertenecen a ese mismo subgrupo....Y es en este punto que me detengo, porque me parece que esas actitudes de vida, hicieron que poco a poco perdieran el lugar que supimos tener año más año menos hasta los 90 y pico.
En fin, al menos ya falta poco para ir a las urnas, así se termina este sucio juego en el que tantos y tantas participan. 
Luego, seguirá la vida...como siempre...y se esfumarán las promesas...y aparecerán los ataques de la oposición, y nunca nadie ofrecerá su mano sin mirar el color político. O en todo caso ¿llegará alguien que venga a ofrecer su corazón?...
Como siempre, gracias por leer mi blog. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? ¡Hasta el viernes próximo! Buena vida
 Lu
Frases para pensar:
Una mentira no tendría sentido si la verdad no fuera percibida como peligrosa
Alfred Adler
Generalmente la experiencia se atribuye a las personas de cierta edad y, lo que es peor, se la atribuyen ellas mismas.
E. W. Stevens
"Aquéllos que eran vistos bailando, eran considerados locos por quienes no podían escuchar la música"
Friedrich Nietzsche
 Acá no zafás:
(para eso  me hice “bloggera”, para publicarme...¡así que leé la entrega Nº  168 de la suelta de mis letritas)
Silencios
Nada para decir. 
O sí...mis ideas se atropellan,
pero, tumefacto, el cerebro no las ordena.
Las palabras estallan en mi boca, 
se mueven lo labios, 
no hay sonidos,
no digo nada...
El algún sitio quedaron atrapadas
con los recuerdos, los sentimientos no dichos y
con esos momentos a puro coraje en que 
te quería decir... pero no dije.
Y una vez más frente a frente, midiéndonos con la mirada...
Levantaste la mano...
Tomé mis maletas, abrí la puerta y salí.
Levantaste la mano...para decir adiós.
Y no dijiste nada.

1 comentario:

  1. Bueno, bueno. Qué temazo el de la intro. Me gusta, has puesto allí mucho de lo que pienso y piensan otras personas. Es lamentable que así sea, pero es nuestra realidad. Y con respecto al recuerdo de que alguien paraba su auto para acercarte adonde fueras, lo viví en mi Río Grande, allá en los 78/80 y pico, y no porque fuera docente sino porque eramos vecinos solidarios que aunque no nos conociéramos teníamos conciencia de comunidad y nos ayudábamos. Tal vez no tenga mucho que ver pero por entonces los que llegábamos éramos ayudados por los que ya estaban y habían venido igual que nosotros, casi con lo puesto. Con la venida de la enorme migración de medidados de los 80 eso ya no se vio.
    En cuanto a la política fueguina, no estoy al tanto, pero de lo que sí estoy segura es que para muchos de allá es símplemente un negocio. Como antigua pobladora que soy, puedo dar fe de cómo llegaron ciertos zares de la política actual y en poco tiempo cambiaron su situación socioeconómica de un modo tan rápido que no se puede creer que fuera trabajando. En fin que llegan las elecciones y como bien decís después, más de lo mismo.
    Me encantó Silencios, y seguis diciendo que no sos poetisa. Besos, Evy

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