Tampoco me importa el mío
Cuando creía que ya nada podía asombrarme respecto a la cultura machista que imperó durante siglos, y que aún hoy a pesar de los avances impera, cuando la gente se pregunta porqué tantos feminicidios, tema que ya traté en sendas oportunidades en este blog. Cuando siempre he sostenido que parten, justo, de la imposibilidad de tantas personas de cortar de raíz con esa cultura, descubro algo que me tiene "boquiabierta"
¿Sabían ustedes que en la década de los 50 hubo una "Guía para la buena esposa"?
Según he leído en Clarín.com-Entremujeres- 03/04/2017
..."la Guía había salido de la revista femenina estadounidense Housekeeping (fundada en 1885), pero se reeditó en el año 1957 en el semanario Jonh Bull. La ironía de la historia es que su supuesta autora, la española Pilar Primo de Rivera (1907-1991), quien tuvo un papel importante en la dictadura franquista, nunca se casó".
He aquí algunas de las imágenes con "consejos" que he encontrado en google .
Podría agregar tantas reflexiones, podría enojarme mucho o reírme a carcajadas de estas imágenes...de estas "enseñanzas".
Pero no. No voy a decir nada. Son muy elocuentes y de por sí dicen demasiado.
Se me ocurre ahora que mi mamá me habrá "atosigado" con varios de esos consejos. Tal vez por eso nunca me casé...
Ya dirán ustedes todo lo que se les venga en ganas.
Gracias por pasar por aquí. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? Hasta el viernes próximo. Buena vida y BUENA VIBRA.
Lu
Frases: Porchia, Antonio II
Estar en compañía no es estar con alguien, sino estar en alguien.
Se vive con la esperanza de llegar a ser un recuerdo.
Pueden en mí, más que todos los infinitos, mis tres o cuatro costumbres inocentes.
Sí, me apartaré. Prefiero lamentarme de tu ausencia que de ti.
Sí, me apartaré. Prefiero lamentarme de tu ausencia que de ti.
Creen que moverse es vivir. Y se mueven, no para vivir. Se mueven para creer que viven.
“Nadie te ha dado nada por nada si nadie te ha dado el corazón, porque sólo el corazón se da por nada.”
Acá no zafás:
(por eso me hice “bloggera”, para publicarme... ¡así que leé la entrega Nº 262 de la suelta de mis letritas)
Como si fuera viento
Algunas veces
como si fuera viento
arraso con todo
lo que a mi paso encuentro
Otras,
soy suave brisa
cuando me das tu tiempo
en tiernas caricias.
-Pero-
a veces
soy calma chicha
soy calma chicha
nada me apasiona
nada me moviliza.
En ocasiones
huracán
me arrollan las pasiones
huracán
me arrollan las pasiones
como un vendaval
Un día viento norte
voy dando calor
con mi mano amiga
y el abrazo protector
Cuando me lastiman
soy viento del sur
-gélida y helada-
me ven hacer...
me ven hacer...
aunque llore en secreto
mi doliente Ser
A veces brisa
otras remolino
soplando del norte,
del sur...
del este...
fluyen mis emociones,
según el tiempo,
bajo los influjos
del dios Eolo,
Señor de los vientos
Que increible!! uff, guia para buena esposa... no se ni que decir, gracias por compartir, uno nunca deja de sorprenderse jaja.
ResponderBorrarMe fascina lo retro los colores los mensajes me hacen sonreir...
ResponderBorrarSimplemente porque son ciertos...
Y aunque retro es el pasado como comicidad lo disfruto tanto...
Es diciembre y el fresco se siente en Miami-
Brisa de otoño
el mar tiene colores pintados
el cielo canta y me canta a veces cuando lo miro mientras espero debajo de un semáforo borroneado continuar mi camino
Abrazos
Ay, Lu, esa guía, claro que la conozco, una guía para gente muy católica y de ciudad con posibles. En los entornos rurales las mujeres en España trabajaban más que los hombres y no creo que fueran tan complacientes y sumisas.
ResponderBorrarEn 1975 el año que yo me casé fue el mismo que murió Franco nuestro rídiculo Dictador, y las mujeres ya andábamos en otra onda muy distinta.
Nos quitamos el sujetador, acortamos las faldas, trabajábamos fuera de casa y no esperábamos al marido con las zapatillas de estar por casa en la boca, porque muchas veces ellos llegaban antes que nosotras, aunque todavía no podíamos abrir una cuenta en el Banco sólo a nuestro nombre, por ejemplo.
Sí que recuerdo de estudiante algo relacionado, a las mujeres nos obligaban a hacer lo que se llamaba "El Servicio Social", sí o sí, o no podías matricularte de un ciclo superior.
Y en ese "Servicio Social" había horas de voluntariado con enfermos o lo que fuera, la mujer como cuidadora. La asignatura del Espíritu Nacional, un horror planfetario, y un muestrario de pequeñas costuras y bordados, que se suponía que todas las mujeres debíamos saber hacer, independientemente de a lo que quisieras dedicarte profesionalmente.
Tengo que reconocer, que sólo me presenté al examen de la asignatura, y el resto me lo falsearon y me lo hicieron con la complicidad de un cura muy inteligente que me ayudó con mis estudios.
Así que aunque todavía nos queda mucho a las mujeres por conseguir, ya hemos recorrido un tramo largo.
Frases:
"Pueden en mí, más que todos los infinitos, mis tres o cuatro costumbres inocentes" Esa soy yo, Lu, un animal de constumbres.
Lu, que hermosa la idea de comparar los vientos con los diferentes estados de ánimo, aunque por acá el Norte sea el gelido y el Sur el cálido.
Lo peor es la calma chicha, mejor que las emociones se muevan y si puede ser un rato en modo vendaval que nos agite y nos ponga en marcha.
Un abrazo,
Hola Tesa
ResponderBorrarSi, creo que en Argentina sucedía lo mismo en esos tiempos.
Imagínate que en los campos el trabajo era duro y la mayoría eran inmigrantes italianos o españoles. O sea, también aquí en zonas rurales trabajaban las mujeres a la par de los hombres.
Y en los 70, la "renovación de aires" fue "global", para usar el término de moda.
Pero, como sea, es obvio que ese manual surgió no como un libro cómico...Ciertamente era lo que se esperaba de la mujer, a pesar de que el paradigma estaba cambiando.
Fíjate que la versión original fue escrita mucho antes, según reza la nota de Clarín, la de 1957 fue una reedición.
Y coincido en que se ha avanzado mucho...tanto cómo aún nos falta. Lo más difícil es, a mi parecer, erradicar definitivamente esos vestigios que quedan en el mundo, y en cualquier estrato social, de "cultura machista"...
En tanto eso no suceda, creo, los feminicidos seguirán siendo noticia.
Un abrazo amiga querida.
Te cuento yo sabia que teniamos algo en común
ResponderBorrarSomos de Saguitario.
El 15 es mi cumple....
Y es cierto parte de tu texto es como que lo hubiera escrito yo !!!!!!!!
jajaja
besos llenos de jazmines
Como siempre un poco atrasada en los comentarios, pero siempre fiel, llego a tu blog, leo, razono, comento.
ResponderBorrarEse manual de la esposa perfecta fue como una especie de catecismo entre las décadas de los 40/50, y no sólo en España donde sus recomendaciones se convirtieron en ley bajo la dictadura de Franco, también se puede ver en las películas románticas de Hollyhood, donde la esposa esperaba al marido con la casa impecable, los niños dormidos y un rica cena preparada vistiendo ella un hermoso modelo cuidado con un primoroso delantal. Realmente un espanto, aunque no se crea hay muchos países en los que todavía las mujeres siguen siendo esclavas y no solamente de palabra.
Me encantó tu poema, esa comparación del sentir con los vientos es muy original y las metáforas son hermosas y pienso en lo que siempre decis, que lo tuyo no es la poesía, besos, Evy
Precioso"
ResponderBorrar