viernes, 28 de junio de 2024

Tormenta eléctrica

 Tampoco me importa el mío
Hoy sí seré muy breve y publicaré un relato un tanto más extenso de los que habitualmente publico.
Sólo decirles que Ushuaia es el resumen de todas las postales del mundo. ¡Lujuriosos están sus paisajes nevados! Lamento no haber salido a sacar fotos, atravesada que estoy por el problema de falta de agua en mi casa.
Intentaré tomar imágenes en el transcurso de esta semana. 
Comparto, de momento, unas tomadas de la página de turismo de la Municipalidad de Ushuaia:
Hoy, de casualidad, topé con este poema que mi memoria tenía guardado en algún rinconcito y me pintaron ganas de compartirlo con ustedes para finalizar esta sección de mi casita de letras:
BENDICIÓN DE DRAGÓN
Gracias por pasar, hasta el viernes que viene o hasta cuando gusten volver.
 
Lu
Esa Musiquita en el recuerdo
NOTA: Y como un pensamiento trae otro, y otro, y otro más, recordé "DESIDERATA". En la voz de Roberto Vicario. Apuesto a qué muchos y muchas de ustedes también recordarán este poema y esa versión.
¡Qué disfruten de esta que acabo de encontrar en YouTube!
                                       Acá no zafás:
   (por eso me hice “bloguera”, para publicarme...entrega Nº555 de la                                                                          suelta de mis letritas)
 Tormenta eléctrica
Estábamos en Villa Carlos Paz, en la provincia de Córdoba.
Mi hija, que con sus trece años se "las sabía todas", estaba bastante molesta por tener que compartir unos días de vacaciones con su mamá.
Entonces
Muy paciente su mamá, o sea yo, ponía la mejor onda a esos bellos días de enero, comprendiendo que tenia una hija adolescente y que, por suerte, emocionalmente era una niña muy sana por lo qué no era de extrañar esas conductas propias de la edad.
Por eso
Había previsto también la compensación para "tal tortura" por lo que luego iríamos a pasar tiempo al pueblo donde vivían sus primas y las amigas de las mismas, que formaban un grupete de "niñas en crecimiento veloz" de entre trece y quince años.
Así las cosas
Hiji "soplando" y yo proponiendo ideas para divertirnos juntas, a las que en ocasiones respondía: "Vieja, ¿no te das cuenta que ya soy grande?"
Por eso
Aquella noche de estrepitosa tormenta eléctrica, resolví que me iría a dormir temprano, falta me hacía descansar un poco, y cuando fui a darle el consabido "besito de las buenas noches", la encontré, literalmente, pegada a los ventanales del balcón.
Los rayos y relámpagos iluminaban, bellamente, la oscuridad de la noche. El viento, la lluvia y los potentes truenos, completaban la escena nocturna.
Mi "niña grande", se dio vuelta para mirarme a los ojos y me dijo
-Ma, y ¿si salimos al balcón para ver un poco más?
-¡Agus! respondí con una amplia sonrisa, es solo una tormenta eléctrica.
Fue entonces cuando clavó su mirada, firme y penetrante, en mí y respondió
-Yo jamás vi una
Y fue entonces también cuando me di cuenta de que mi hija, nacida y criada en Ushuaia, no tuvo oportunidad de presenciar tan bello espectáculo habida cuenta que, por estos lares, no sucede dicho fenómeno meteorológico.
Comprendí de inmediato que esa niña, que se sentía adulta, tenía miedo a la vez que fascinación por dicho evento y necesitaba, aún mas allá de su postura, que su mami, o sea yo,  la acompañara.
Total
Nos pusimos capas para guarecernos de la lluvia y, hasta que se nos empezaron a caer los párpados, nos quedamos charlando sentadas en un rincón bastante protegido del balcón...
Casi como si estuviéramos en la primera fila de una gran platea para presenciar esa bella obra de la naturaleza. 
Casi como si mi hija hubiera zanjado sus "diferencias generacionales", disfrutando del espectáculo visual y -¡por fin en esas vacaciones!- disfrutándonos mutuamente.

viernes, 21 de junio de 2024

Insomnio

 Tampoco me importa el mío
Hola amigos y amigas blogueros. 
Seré breve, lo cual no me resultará fácil.
¿El problema en mi casa? ¡Continúa! Sigo sin agua, por lo tanto, viviendo en la casa de una amiga.
Ahora mismo estoy en la mía, por eso rapidito aprovecho el rato para contarles algunas cositas e invitarlos a conocer 25 de Mayo, aprovechando que puedo usar mi computadora.
25 de Mayo es una ciudad de la provincia de Buenos Aires, tiene alrededor de 36.000 habitantes y dista unos 240 km de la ciudad de Buenos Aires
Allí viven mi "hermanito de chupete" y mi "cuñada", con quienes he pasado uns bellos y apacibles días.
¿Vamos a su plaza? 
En esta ciudad hay un corsódromo con capacidad para 6000 persona cómodamente sentadas. El carnaval cobra cada vez más popularidad y asisten a los desfiles no solo los habitantes de 25 sino también de diversas ciudades vecinas. No he estado nunca en estas fiestas carnestolendas pero no tengo dudas de que deben ser dignas de presenciar.
El corsódromo está ubicado en el Boulevard Valmarosa del parque "Laguna las mulitas"
Los y las invito a recorrer rinconcitos de este parque vestido de otoño.

Y para finalizar con este muestreo, podemos compartir imágenes del bellísimo parque de la casa de Inés y Pedro, mis anfitriones, y...
¡No puede faltar una de Antonia!, la perrita más amorosa del mundo mundial. 
No, gatitos o gatitas no tienen...¡Los seres  humanos no son  perfectos! 😊
Espero hayan disfrutado del paseo. A mi me hizo bien este rato para olvidar momentáneamente el problema que estoy transitando.
¡Ya llegará el momento de recordarlo como un mal sueño!
Gracias por pasar, hasta el viernes que viene o hasta cuando gusten volver.
 Lu
Esa Musiquita en el recuerdo
                                        Acá no zafás:
   (por eso me hice “bloguera”, para publicarme...entrega Nº554 de la                                                                          suelta de mis letritas)
NOTA: Sí, es cierto, ya he publicado este texto en otras ediciones pero....
¡El temita en cuestión me atraviesa en estos momentos! Gracias por el aguante.
Insomnio
Como cada noche, alrededor de la una de la madrugada, se dispone a dormir.
Como cada noche algunos pensamientos empiezan a amontonarse en su mente y, esta vez, las malditas gotas y ese tic…tic…tic… insoportable le recuerdan que debe llamar un plomero. Eso a su vez le recuerda que necesita un albañil, o chapista o lo que sea que arregle el techo…el viento azota y las chapas juegan una melodía sin sordina…
Los minutos se pisan los talones apurando la hora siguiente.
Una vuelta trae, enredada en las sábanas, otro pensamiento y ese pensamiento otro, en las despeinadas ideas de la madrugada. Otra  vuelta y otro giro interminable de lo "por hacer" y esas misma sensación de indefensión, solitaria y final.
Respirar…eso, debo respirar, se dice.
Inspira…exhala…inspira…exhala…inspira…exhala, inspira,  exhala, inspira, exhala, inspiraexhalainspira. ¡No resulta!
Pispear la hora no le parece buena idea, pero no lo resiste… ¡van a ser las 4 de la madrugada!
Hacen ya tres malditas horas que da vueltas como en una alocada calesita, sin poder llevarse nunca la sortija.
Más allá, las sirenas anuncian alguna desgracia…no puede reconocer si es de bomberos, o policía o ambulancia. ¡Da igual!  Lo que sea, las sirenas nunca suenan felices…
¡Malditos gatos! Al menos espera que ninguna gata preñada vaya a tener cría en su jardín... Mientras ellos se regodean en los placeres del sexo, ella soporta los maullidos y aumenta su desvelo cuando piensa que, si al menos alguien durmiera a su lado, podría reemplazar la rabia insomne por un apurado y excitante juego bajo las sábanas…
¿Adónde debería realizar la denuncia de gatos abandonados?  
Piensa en contar ovejitas. Nunca supo el porqué  de esa frase...tal vez la inventó algún ganadero con problemas para conciliar el sueño. 
Mejor, se dijo, cuento novios, amantes, amoríos, amigos con derecho a roce y otros que pasaron por mi vida...Se pierde en ese recuento, mientras siente  su vejiga a punto de estallar.
Da otra vuelta y otra…
Se levanta, va al baño desganada, ojerosa y, sin prender la luz, se baja el short de algodón (no usa calzones cuando duerme) y deja que escape, sonoro, el chorro.
Vuelve a la cama, destapa la infaltable botellita nocturna de su mesa de luz. Bebe lentamente un trago, luego otro y otro trago. Cree que alguien alguna vez, no sabe donde, dijo que tomar agua de a sorbos es una manera de conciliar el sueño.
Se mete en la cama, aprieta los párpados, acomoda la almohada. Siente calor, se destapa.
Ladran los perros del vecindario y piensa que tal vez, a esa hora, alguno de ellos esté usando de baño su vereda…
Vuelve a enroscar sus pensamientos hacia la gente desaprensiva y mal educada…
Se levanta. 
Abre la ventana y al correr las cortinas, se da cuenta de que empieza a amanecer. Vuelve a juntarlas para que no entre luz.  Deja la ventana entornada…El aire fresco, parece renovar su esperanza de dormir…
Se calma pensando que por suerte es amanecer de sábado, no tendrá que levantarse para ir a trabajar.
Siete en punto de la mañana…Se duerme al fin exhausta…

A las siete y treinta, sonará el despertador que olvidó desactivar en esa maldita noche de insomnio.

viernes, 14 de junio de 2024

AVISO

                      Tampoco me importa el mío

Hola hola. Vengo a decir que no he podido preparar esta edición a pesar de que me había despedido hasta el 14 de junio.

Las vacaciones compartidas con amigos y amigas fueron muy reconfortantes.

¡Menos mal! Porque al llegar a mí casa me encontré con un panorama muy complicado.

Hizo frío extremo, como hace años no sucedía, y al no circular el agua se congeló una parte de la cañería y estalló.

Están trabajando para solucionar el problema y, mientras tanto, estoy viviendo en la casa de una amiga.

Espero que en estos días se pueda resolver y regresar a mí 🏡.

Entonces...

¡¡GRACIAS POR PASAR Y POR EL AGUANTE!! Será hasta el próximo viernes.

Prontito también volveré a comentar en vuestros blogs.