viernes, 2 de septiembre de 2016

Manos

Tampoco me importa el mío
No voy a volver sobre los "informes meteorológicos", pero quiero que sepan que desde el martes nevisca en Ushuaia, luego sale el sol y ¡de nuevo el barro! Luego llueve sin parar, y ¡otra vez nevisca! Sin olvidarse de pasar por aquí, como corresponde en esta inestabilidad climática, el señor viento soplando furioso...¿Será por el estado calamitoso en que se encuentran las calles de nuestra ciudad? ¿Será por los tardíamente arrepentidos de haber puesto tan mal el voto en las últimas elecciones? ¿Será por la ausencia de la gobernadora, que sigue sumando puntos para su currículum en Buenos Aires? En tanto, los problemas de desempleo, la situación fabril, el no llamado a paritarias, los robos a los supermercados, etc demuestran en el minuto a minuto que esta provincia se desmorona. Vaya uno a saber...pero hasta el clima está enrarecido y los vientos, furiosos, así lo anuncian.
Sumado a eso, hay mucha agitación en algunas oficinas municipales debido a la denuncia que interpuse contra mis vecinos, dueños de la jauría.
Lo mejor es ese aspecto, por el momento, : vinieron a mi casa dos inspectores de obras privadas, y ni bien les abrí la puerta para que salgan a mi jardín ¡los 4 perros se lanzaron sobre el tejido de alambre y no pararon de ladrar hasta que salió el dueño y los encerró! O sea...comprobación in situ de lo que estoy denunciando.
Lo peor: No hay una normativa que indique como debe ser el muro lindante en caso de que se tengan muchos animales. No me sorprende, siempre lo supe y, desde el comienzo de esta mala historia, estoy preparándome para ir con otros vecinos a formalizar la denuncia en el Concejo Deliberante y solicitar que se amplíe la normativa respecto a tenencia de canes.
En tanto, la denuncia sigue por los carriles pertinentes, y no todas las oficinas actúan con la misma celeridad y justicia...
Sin embargo, en algunas en las que no imperan los "amiguismos" están pensando en gestionar también el pedido de ampliatoria de la norma, para dar más impulso aún a mi  iniciativa.
Y tengo la certeza de que, sino antes de la navidad, ni bien comenzado el periodo de sesiones 2017 esa normativa estará en vigencia.
En el mientras tanto, a tomarlo con calma y unos días de vacaciones.
Estaré ausente los próximos dos viernes. He decidido, impulsivamente, tomarme unos días para recuperar energías y avanzar con más ímpetu en los últimos meses del año. Iré a despejarme de todo a Luján. En la provincia de Buenos Aires. Voy a la casa quinta de mi amiga Patri, a disfrutar del "campo".
Espero encontrarlos por aquí a mi regreso, y que sigan acompañándome en esta, mi casa de letras.
Como siempre, gracias por leer mi blog. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? ¡Hasta el viernes 23 de septiembre! Buena vida.
 Lu
Frases para pensar sobre la injusticia
"Una injusticia hecha en perjuicio de uno solo es una advertida amenaza contra todos
Ralph Waldo Emerson
La indiferencia es el apoyo silencioso a favor de la injusticia” 
Jorge González Moore
Hay un hambre que es tan grande como el hambre del pan y es el hambre de la injusticia, de la incomprensión.” 
 Enrique Santos Discépolo
Perdonando demasiado a quienes cometen faltas, se hace una injusticia a quienes no las cometen” 
Baldassare Castiglione
“Sé justo en el momento preciso. Toda justicia que tarda es injusticia” 
Marcel Schwob
Acá no zafás:
(por eso  me hice “bloggera”, para publicarme... ¡así que leé la entrega Nº 214 de la suelta de mis letritas)
Manos
Todos disfrazados. 
Fue la consigna para esa noche de pernocte en la escuela de mi hija.
Los chicos y las chicas finalizaban la etapa, ¿feliz?, de escuela primaria.
Noviembre se presentaba cálido y acepté la invitación para asistir como "mamá acompañante".
Había aprendido a disfrutar, a partir de mi hija, de la compañía de esas maravillosas personitas que transitaban la "edad del pavo".
Me esmeré en mi disfraz para no ser reconocida y lo logré. Era una perfecta bruja, máscara incluida.
Montada en mi escoba, recorría el patio de la escuela ante el asombro de los niños y niñas que intentaban averiguar de quien se trataba tan misterioso y subyugador personaje.
Convengamos que, por mi contextura física, bien podría haber sido uno de ellos.
Las maestras, disfrutaban del espectáculo, a sabiendas de quien era "la bruja". Mi hija, muy buena actriz por cierto, seguía el ritmo de sus alborotados compañeros mostrándose tan intrigada como ellos.
El profe de educación física, disfrazado de futbolista, sonreía cómplice. 
¡Que bello hombre, buena persona y mejor profesor era! Estaba separado desde hacía un tiempo, casi el mismo que yo...
Ana y Yadda, las maestras, jugando de Celestinas, nos habían invitado al pernocte a ambos.
Todo eran risas, juegos, bailes...
Mientras bailaba, feliz y divertida, con "el profe" rondándome, se acercó Andreíta y me dijo:
" Ehhh boluda, no sé quien sos boluda...Me das miedo boluuú.. no puedo "sacarte"..."
Y en lo mejor de la fiesta y la intriga la que se acercó, sigilosamente, fue Julieta “arrastrándome” hasta el improvisado "bar" para mirarme las manos, bajo la lámpara que iluminaba ese sector.
Me miró, sonriendo con aire triunfal,  y sin darme posibilidad de defensa alguna, empezó a los gritos: "Chicos chicos, vengan, descubrí algo" De pronto, me vi rodeada por una veintena de pre adolescentes que esperaban oir la confesión de la compañera. Y Julieta, desafiante, altiva y feliz gritó ¡Mírenle las manos! ¡Esta no es de los nuestros! ¡Es una vieja!
Muertos de risa se dispersaron luego para seguir con sus juegos, bailes y "chismeríos" típicos de la edad.
¿Y yo? 
Quedé sola frente al escritorio, que oficiaba de "barra" del improvisado bar, mirándome las manos.
Entonces...
Se acercó el profesor y me dijo: "Soy un viejo futbolista en busca de una vieja bruja que, con algunos pases mágicos, quiera iluminar mi camino"...
Aún hoy agradezco: no haberme puesto guantes esa noche, la perspicacia de Julieta y que los chicos y chicas, agotados, se hayan dormido a la medianoche. 
Por eso...
Justo a la hora de brujas comencé, como corresponde al oficio, mi ronda y, sin disfraz, tuve mi fiesta personal.

3 comentarios:

  1. Hola, Lu, delicioso cuento con ese final tan prometedor y sensual.

    En la hora de las brujas, cuando todos duermen es cuando suelen ocurrir las historias que vale la pena recordar. Me encantó, Lu. Las brujas no tenemos la manos tersas pero si llenas de vida.

    Lo ideal con tu vecino sería que él contratara un educador de perros, pero parece por lo que cuentas que no hay otro remedio que confiar en las "normativas" para recuperar la paz perdida en tu hogar.

    Allá la nieve que no llega, acá los veranos cada vez más largos, calurosos y secos. La avaricia del hombre cargándose el equilibrio de la Naturaleza. Somos lo peor.

    Pásalo espectacular en tu viaje a Buenos Aires. Seguro que vuelves cargada de nuevas energias y muchas historias que compartir.

    Un abrazo, y buen viaje, Lu.

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  2. Hola Lucía a la hora de las brujas te leo. en un sábado super frío en estos lares. Estufas de por medio, cena frugal regada con una copa de Syrah, (me castigo mucho últimamente) Qué cosa eso de los perros no se termina nunca, es tan burocrático todo que al final te vas a hacer amiga de los canes. El tiempo o el clima está loco en todas partes, acá recontra frío y lluvia, qué asco. Nieve en las sierras de mi amado, lluvia por los pagos de mi hermana en fin, que ya no sabe una qué ponerse para salir de casa. El cuento Magnífico, me encantó, tiene de todo un poco y está muy bien hecho. Te cuento que para cuando regreses yo estaré en Bialet Massé y en octubre 5 al 9 en Ushuaia, noviembre del 16 al 20 Villa Giardino, en la docta. La literatura de para mucho, estoy muy contenta con tanto viaje, espero que lo pases re lindo en Luján, besos, Evy

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