Tampoco me importa el mío
En todo caso, voy a hacer mención de nuevo al pasado reciente. Pero esta vez en alusión a la climatología. Es que en el transcurso de esta semana, nevó como en los viejos tiempos. Nevó como para hacer honor al sitio en que vivo, o sea a LA CIUDAD MAS AUSTRAL DEL PLANETA, nevó para que no queden dudas de que AQUÍ ES EL SUR DEL SUR...
Y si digo todo esto es porque escuché a mucha gente, aún a periodistas, sorprenderse por la nevada...
Vivo aquí desde hacen más de 32 años y ni por un sólo invierno olvidé aquellos inviernos, aquellas nevadas, aquellos días sin agua porque se escarchaban las cañerías de mi casa, aquellos días de ir caminando al laburo, primero, por falta de vehículo, luego por no poder sacarlo pues se quedaba atascado en la nieve....Las veces que llevé conmigo a mi hija, pues era imposible acercarla a su escuela y luego ir hasta mi trabajo, caminando, con tanta nieve acumulada y tanto frío coloreándote las mejillas y la nariz...Luego empezaron a ser los inviernos mucho más benignos, tal vez por el cambio climático, o por otras razones varias que no vienen ahora a cuento.
Por eso, no comprendo porqué tanta sorpresa ante un invierno de pura ley....En todo caso a mi me sorprenden las temperaturas sobre cero que hemos tenido en inviernos recientes, los días de verano de estos últimos años en los que podemos andar tranquilamente en "musculosa", esos días de calor cuasi insoportable en que tenemos que abrir las ventanas para ventilar y entonces, como en el norte, entran las moscas. Y es necesario decir al respecto que... ¡antes no habían moscas en Ushuaia!
Y no estoy hablando en todo caso de que guste o no la nieve, de si las calles están limpias o no, de los trastornos que ocasiona cada nevada intensa, etc. Todo eso es harina de otro costal.
Sólo estoy diciendo que nadie debería sorprenderse por una nevada intensa en esta ciudad...
Voy a compartir con ustedes algunas "fotos escarchadas" tomadas desde el interior de mi casa, para que quienes no conocen o no viven por estas latitudes tengan una mínima dimensión de la belleza de un paisaje nevado que, en lo que a mí respecta, basta para paliar las dificultades que se suscitan luego de un evento así.
Y si digo todo esto es porque escuché a mucha gente, aún a periodistas, sorprenderse por la nevada...
Vivo aquí desde hacen más de 32 años y ni por un sólo invierno olvidé aquellos inviernos, aquellas nevadas, aquellos días sin agua porque se escarchaban las cañerías de mi casa, aquellos días de ir caminando al laburo, primero, por falta de vehículo, luego por no poder sacarlo pues se quedaba atascado en la nieve....Las veces que llevé conmigo a mi hija, pues era imposible acercarla a su escuela y luego ir hasta mi trabajo, caminando, con tanta nieve acumulada y tanto frío coloreándote las mejillas y la nariz...Luego empezaron a ser los inviernos mucho más benignos, tal vez por el cambio climático, o por otras razones varias que no vienen ahora a cuento.
Por eso, no comprendo porqué tanta sorpresa ante un invierno de pura ley....En todo caso a mi me sorprenden las temperaturas sobre cero que hemos tenido en inviernos recientes, los días de verano de estos últimos años en los que podemos andar tranquilamente en "musculosa", esos días de calor cuasi insoportable en que tenemos que abrir las ventanas para ventilar y entonces, como en el norte, entran las moscas. Y es necesario decir al respecto que... ¡antes no habían moscas en Ushuaia!
Y no estoy hablando en todo caso de que guste o no la nieve, de si las calles están limpias o no, de los trastornos que ocasiona cada nevada intensa, etc. Todo eso es harina de otro costal.
Sólo estoy diciendo que nadie debería sorprenderse por una nevada intensa en esta ciudad...
Voy a compartir con ustedes algunas "fotos escarchadas" tomadas desde el interior de mi casa, para que quienes no conocen o no viven por estas latitudes tengan una mínima dimensión de la belleza de un paisaje nevado que, en lo que a mí respecta, basta para paliar las dificultades que se suscitan luego de un evento así.
Como siempre, gracias por leer mi blog. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? ¡Hasta el viernes próximo! Buena vida.
Lu
Frases para pensar:
Un cobarde es incapaz de mostrar amor; hacerlo está reservado para los valientes
Mahatma Gandhi
Aquellas personas que no están dispuestas a pequeñas reformas, no estarán nunca en las filas de los hombres que apuestan a cambios trascendentales.
Mahatma Gandhi
Un error no se convierte en verdad por el hecho de que todo el mundo crea en él.
Mahatma Gandhi
Acá no zafás:
(para eso me hice “bloggera”, para publicarme...¡así que leé la entrega Nº 170 de la suelta de mis letritas)
Otra vez la lluvia...
Otra vez la lluvia...
un rostro mojado
recuerdo de días felices
presente de ausencias
volver al pasado
lágrimas como lluvia
aguacero sin calma
que desborda y anega
las grietas del alma.
Otra vez la lluvia...
una mano extendida
hacia la nada
mano que prodigó
caricias
calmó dolores
preparó una sopa
hizo magia
pintó los días
de muchos colores
peinó una niña
que creció, sola,
en abrazos
misma mano
que hoy,
mustia,
surcada,
se extiende a un vacío
que sangra la herida
y da una estocada.
y da una estocada.
Nadie para asirla
y acariciarla...
y acariciarla...
Otra vez la lluvia...
un rostro arrugado.
Hola amiga, evidentemente la nieve y el invierno ejercen efectos nostálgicos en tu espíritu. Es verdad, no sé a qué tanta admiración por una nevada, nevada de aquellas, en un lugar donde la nieve es tan normal como la humedad en estos lares bonaerenses. Pero claro, de algo hay que hablar, y el tiempo es un buen motivo, para llenar el silencio y el vacío de temas fundamentales. Me encantan tus fotos, me recuerdan a mi casa de Kayen con esos carámbanos colgando de los aleros. Y el poema, muy emotivo, claro que no habla de la nieve sino de la lluvia, esa lluvia interna que a veces se desata en el clima de nuestra alma. Besos, Evy
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