Tampoco me importa el mío
En este inverno atípico, los días y las horas se suceden, "con prisa y sin pausa" diría yo, parafraseando una conocida frase.
Pero a pesar de la falta de nieve, de días húmedos, temperaturas altas para la época y ráfagas de viento norte, o temperaturas por debajo de cero grado y escarchas diurnas, a pesar de tanta atipicidad, lo que por suerte sigue siendo típico de esta época del año es la extensión de las horas de luz. En ese sentido es, para mi, una suerte que los días se sucedan tan velozmente. Prácticamente está amaneciendo a las 9 de la mañana y oscurece a las 18, a diferencia del mes de junio, en que no se veía luz diurna hasta las 10 y a las 17:30 nuevamente era de noche.
Y hablando de situaciones que no cambian, no entiendo como con tanto invento y avances tecnológicos, no encontraron aun la manera de mantener las casas limpias ¡sin tener que dedicar tiempo a limpiarlas!
Detesto barrer, aspirar, limpiar los sanitarios, sacar el polvo que se acumula indefectiblemente en todos los rincones, muebles adornos equipos electrónicos etc.
Detesto tener que hacerlo, pero también detesto ver la casa desordenada, entonces, no me queda más que , de vez en cuando, poner "manos a la limpieza"
Y cuando lo hago, ¡termino agotada! Entonces he estado pensando que una manera de pasarla mejor y sacar provecho a la situación, sería hacer una rutina de barrido, aspirado, limpieza de baños, cocina etc, acorde a una rutina gimnástica: bíceps, glúteos, abdominales etc. Digo, si Joshep Pilates pudo idear su método de entrenamiento, tal sus necesidades y ser reconocido mundialmente, si Moshé Feldenkrais pudo legar su método...¿porqué no puedo yo lograr un "método Porta", para descontracturar mujeres y hacer más placentero el trabajo doméstico? Sería como matar dos pájaros de un tiro, ¿o no? Estaríamos bellas, sanas, con nuestros cuerpos esbeltos y nuestras casas en perfecto orden y limpieza.
Si están sonriendo ante mi ocurrencia, me alegro mucho de que así sea. Y si están pensando que mejor contrato una empleada para que haga las tareas, les digo que, en este año que no sabemos donde vamos a ir a parar con la economía, me abstengo de hacerlo pues aunque sean 3 horas semanales a fin de mes suma mucho dinero el salario de la trabajadora.
Y en verdad siempre, hasta febrero de esta año, tuve alguna empleada para que se ocupara de lo que a mi no me gusta. Por eso es que ahora me cuesta tanto hacerlo.
Y a propósito, hablando de empleadas domésticas, pregunto ¿No hay hombres para realizar el trabajo de la casa? ¿Hay o no empleados domésticos?
Y si sigo hilando fino me pregunto ¿cuántos hombres comparten con su mujer las tareas del hogar? Si me dicen que casi ninguno, voy a creer que vamos para atrás...vamos mal...¡muy mal! Voy a creer que la igualdad, los derechos etc se dicen pero no se practican.Sé que entre los jóvenes es una práctica frecuente el de compartir las responsabilidades y tareas de "adentro de casa", pero pregunto ¿qué pasa en ese sentido con los cuarentones a más?
Y hablando de estos temas se me acaba de ocurrir. Voy a poner un aviso. Tal vez consiga un empleado, en ese caso, sacrificaría alguna otra cosa para no salirme de mi presupuesto mensual...creo que valdría la pena. Y, si lo consigo, tal vez no sería necesaria la creación del "método Porta" para lograr un cuerpo esbelto y buena salud...
Pero a pesar de la falta de nieve, de días húmedos, temperaturas altas para la época y ráfagas de viento norte, o temperaturas por debajo de cero grado y escarchas diurnas, a pesar de tanta atipicidad, lo que por suerte sigue siendo típico de esta época del año es la extensión de las horas de luz. En ese sentido es, para mi, una suerte que los días se sucedan tan velozmente. Prácticamente está amaneciendo a las 9 de la mañana y oscurece a las 18, a diferencia del mes de junio, en que no se veía luz diurna hasta las 10 y a las 17:30 nuevamente era de noche.
Y hablando de situaciones que no cambian, no entiendo como con tanto invento y avances tecnológicos, no encontraron aun la manera de mantener las casas limpias ¡sin tener que dedicar tiempo a limpiarlas!
Detesto barrer, aspirar, limpiar los sanitarios, sacar el polvo que se acumula indefectiblemente en todos los rincones, muebles adornos equipos electrónicos etc.
Detesto tener que hacerlo, pero también detesto ver la casa desordenada, entonces, no me queda más que , de vez en cuando, poner "manos a la limpieza"
Y cuando lo hago, ¡termino agotada! Entonces he estado pensando que una manera de pasarla mejor y sacar provecho a la situación, sería hacer una rutina de barrido, aspirado, limpieza de baños, cocina etc, acorde a una rutina gimnástica: bíceps, glúteos, abdominales etc. Digo, si Joshep Pilates pudo idear su método de entrenamiento, tal sus necesidades y ser reconocido mundialmente, si Moshé Feldenkrais pudo legar su método...¿porqué no puedo yo lograr un "método Porta", para descontracturar mujeres y hacer más placentero el trabajo doméstico? Sería como matar dos pájaros de un tiro, ¿o no? Estaríamos bellas, sanas, con nuestros cuerpos esbeltos y nuestras casas en perfecto orden y limpieza.
Si están sonriendo ante mi ocurrencia, me alegro mucho de que así sea. Y si están pensando que mejor contrato una empleada para que haga las tareas, les digo que, en este año que no sabemos donde vamos a ir a parar con la economía, me abstengo de hacerlo pues aunque sean 3 horas semanales a fin de mes suma mucho dinero el salario de la trabajadora.
Y en verdad siempre, hasta febrero de esta año, tuve alguna empleada para que se ocupara de lo que a mi no me gusta. Por eso es que ahora me cuesta tanto hacerlo.
Y a propósito, hablando de empleadas domésticas, pregunto ¿No hay hombres para realizar el trabajo de la casa? ¿Hay o no empleados domésticos?
Y si sigo hilando fino me pregunto ¿cuántos hombres comparten con su mujer las tareas del hogar? Si me dicen que casi ninguno, voy a creer que vamos para atrás...vamos mal...¡muy mal! Voy a creer que la igualdad, los derechos etc se dicen pero no se practican.Sé que entre los jóvenes es una práctica frecuente el de compartir las responsabilidades y tareas de "adentro de casa", pero pregunto ¿qué pasa en ese sentido con los cuarentones a más?
Y hablando de estos temas se me acaba de ocurrir. Voy a poner un aviso. Tal vez consiga un empleado, en ese caso, sacrificaría alguna otra cosa para no salirme de mi presupuesto mensual...creo que valdría la pena. Y, si lo consigo, tal vez no sería necesaria la creación del "método Porta" para lograr un cuerpo esbelto y buena salud...
Como siempre, gracias por leer mi blog. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? ¡Hasta el viernes próximo! Buena vida.
Frases para pensar
“Es la prohibición lo que hace que cualquier cosa sea preciosa”
Mark Twain
“Nunca, nunca tengas miedo de hacer lo correcto, especialmente si el bienestar de una persona o animal está en juego"
Martin Luther King
“Educar no es enseñar al hombre a saber, sino a hacer.”
Florence Nightingale
“Muchos jueces son absolutamente incorruptibles; nadie puede inducirles a hacer justicia.”
Bertolt Brecht
“Al río que todo lo arranca lo llaman violento, pero nadie llama violento al lecho que lo oprime.”
Bertolt Brecht
«No aceptes lo habitual como cosa natural, porque en tiempo de desorden, de confusión organizada, de humanidad deshumanizada, nada debe parecer imposible de cambiar.»
Bertolt Brecht
Acá no zafás:
(por eso me hice “bloggera”, para publicarme... ¡así que leé la entrega Nº 209 de la suelta de mis letritas)
Perfecta...pero
extraña
Caminaba
con la mirada fija en la nada misma.
De edad
indefinida, su vestimenta era clásica de mujeres cincuentonas. Si alguien a su
paso la saludaba, ella respondía con una sonrisa afable.
En
la esquina de Alem y Pontón Río Negro se encontró con un hombre.
Se apretaron
en un abrazo y, luego de unos instantes, él se apartó lo suficiente para
mirarle la mirada. Ella sonrió...no dijo nada.
-¿Dónde
está la que fuiste?
-¿Cómo
la que fui?
-La
que te hacía ser como vos, única y personal. Distinta del colectivo femenino, de
las mujeres de tu edad.
-Ah!
Vos te referís a la que llamaban “jetona” o murmuraban, por lo bajo, diciendo
“viste como es”...la "hippie", la que quedaba sola gritando lo que otros y otras callaban,
la que no tenía medidas, ni prejuicios...La que no pudo seguir luchando contra
la hipocresía...
-¡¡La
que siempre amé!!
-¿Y
ahora me lo decís? ¿Ahora que, la que vos estás buscando, se adaptó tanto a
estar adaptada y mutó a lo que hoy soy? ¿Ahora que soy "perfecta" como, también, vos
querías que yo fuera?
Dio
media vuelta y se marchó.
Con
la mirada fija en la nada misma, la vestimenta clásica de mujeres cincuentonas
y unas gotas saladas rodando por su rostro de edad indefinida.