Tampoco me importa el mío
Estuve en Comodoro Rivadavia, en el feliz cumple 89 de mi mamá por elección.
¡A pura risa vivimos intensamente esos dos días!
Y, entre otras cosas, recordamos mis años jóvenes. Aquellos en los que Kitty comenzaba su cincuentena.
Años en los que a mi, como en general a la gente joven, nos interesaba saber que nos depararía el futuro.Kitty, por ese entonces, nos tiraba las cartas y, pueden creerlo o no, sus predicciones eran exactas.
Obviamente no trabajaba con ello. Su arte adivinatorio se circunscribía a su círculo íntimo. Hijos, hijas y amistades entrañables. En general, gente muy joven y mujeres que eran sus amigas.
Ahora, que ya no quiero saber que pasará mañana, me doy cuenta que con el paso del tiempo, ella no quiso más tirar las cartas. Reflexionando al respecto, creo entender que cuando la distancia entre la vida y la muerte se acorta no está bueno adivinar el momento en que la parca te vendrá a buscar.
Creo que con el ímpetu de la juventud, cuando te llevás la vida puesta, sólo te interesa saber si llegará el amor o si lograrás tus metas. Y en eso rondaban las "famosas tiradas". Entonces, todo era sorpresa.
Adelantó embarazos que fueron: el mío entre otros por ejemplo. Visitas inesperadas, algún amante esquivo...
Pero creo que no tiene caso hablar más sobre ello pues a quien no lo ha vivido nada dirá este texto.
Por cierto el arte adivinatorio se remonta a lo largo de la historia y existen tantos métodos como culturas. Por mencionar algunos, el "I Ching", milenario arte de adivinación de la cultura China. O las runas, que practicaban los celtas. Leer la borra del café proviene de pueblos asiáticos. En cuanto a la cartomancia, el Tarot se origina posiblemente en el siglo XIV, o tirar barajas españolas, de los pueblos gitanos son algunas de las tantas opciones.
Ciertamente, este tema de creer o no en las predicciones, es absolutamente personal. Y ciertamente también, hay mas charlatanes y timadores que gente que tiene el don.
¿Qué si yo creo? ¡Pues sí! Creo que hay clarividentes, o como quieran nombrarlos. Lo sé porque lo viví con Kitty. Ella tenía ese don.
(Supongo que aun lo tiene...a pesar de no quererlo)
Gracias por pasar por aquí. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? Hasta el viernes próximo. Buena vida y BUENA VIBRA.
Frases: 3 sobre el futuro
Algunas cosas del pasado desaparecieron pero otras abren una brecha al futuro y son las que quiero rescatar.
Mario Benedetti
Un hombre feliz está demasiado satisfecho con el presente como para obsesionarse demasiado con el futuro.
Albert Einstein
El proyecto es el borrador del futuro. A veces, el futuro necesita cientos de borradores.
Jules Renard
Hoy zafás: (¿ o no?)
NOTA: Sin quererlo, me encontré escribiendo algo mío. Es que solo pensaba publicar aquí algunos poemas de, en mi humilde opinión y sin ser lectora frecuente de poemas, el mas representativo poeta de la patagonia.
Por eso, por ser tan patagónicos sus versos, lo leo, me gusta y era mi amigo: Julio, "Mochi" Leite.
Se están muriendo fueguinos, de la generación del 50. Están partiendo de gira, artistas, escritores, poetas...
La Parca, muy ambiciosa, quiere tener a su lado representantes de la cultura que Tierra del Fuego ha dado.
Este es mi humilde homenaje al poeta que, más recientemente, se llevó de nuestro plano. Al querido Julio José Leite. Popularmente: "El Mochi" (Ushuaia, septiembre/1957- Río Grande, abril 2019)
Mochi, en donde sea que estés
seguro andarás desbocado
en busca del trago amigo
y de mujer que te abrace.
Soltarás versos al viento
con memoria ancestral
-y sonido de kultrunes-
Poemas que hablarán de Isla,
-de aislados-
de Patagonia austral,
-de hombres duros, embriagados-
de lágrimas no soltadas
de tu inmensa soledad.
Algunos poemas de Julio Leite
COMO HACER UN PAN
Muela los huesos
hasta lograr
la buena harina,
desde la levadura
de su rabia.
Amase sobre madera de amigos
con abrazo amase
hasta el cansancio,
después haga fuego
con ramitas de "ganamos"
y en el horno del corazón
que presten sus hermanos.
cocine esa esperanza
a repartir.
MANIFIESTO
No creo en los grandes
hacendados de la poesía,
en los latifundistas de la tinta.
Creo
en el ovejero de las letras,
que con los perros rigurosos
de las situaciones cotidianas
van transhumantes
con su piño de ideas
afrontando cuero al cielo
la palabra,
para darnos abrigo.
Ellos son los que saben
que no es cuestión
de esperar la esperanza,
sino de ganarla.
Los arquitectos de la literatura
que sigan con sus escuadras,
compases y balanzas.
Nosotros,
—peones constantes—
a fuerza de imagen
construiremos
la justa casa del hombre.
hacendados de la poesía,
en los latifundistas de la tinta.
Creo
en el ovejero de las letras,
que con los perros rigurosos
de las situaciones cotidianas
van transhumantes
con su piño de ideas
afrontando cuero al cielo
la palabra,
para darnos abrigo.
Ellos son los que saben
que no es cuestión
de esperar la esperanza,
sino de ganarla.
Los arquitectos de la literatura
que sigan con sus escuadras,
compases y balanzas.
Nosotros,
—peones constantes—
a fuerza de imagen
construiremos
la justa casa del hombre.
Paciencia de cazador y de guanaco
Siempre te esperé(ahora me doy cuenta)
el mundo recorrido, disfrutado y sufrido
moría en los regresos a mi cuarto.
Padecía en mi isla el no encontrarte,
rugía húmedo el dolor,
en silencio rugía como el viento de siempre.
¡¡Hasta cualquier verso tuyo querido Mochi!!
Nota: Por si quieren leer un par más de poemas de Julio, podrán encontrar "Mi cristo Ona" en la entrada del 29/04/16 y "Cordillera Fueguina" en la del 03/10/13. Obviamente, tienen la opción de googlear su nombre. ¡Muchos enlaces los acercarán a sus poemas!