Tampoco me importa el mío
El día que lluevan fideos...¡yo salgo con la cuchara!
Algo así era un dicho popular que usábamos en mi época de bella juventud.
Y lo traigo a cuento porque ¡es lo que me sigue pasando aunque el dicho ya no esté en boga!
Me hubiera encantado compartir con ustedes las fotos del único día soleado y hermoso en el que pude salir a caminar las callecitas de Bs As.
(Recuerden que además del mal clima estuve muyyy apestada).
Fue el 16/07. Me sentía un poco mejor y el sol iluminaba el frío domingo.
Mi amiga se iba a un cumpleaños en la zona sur del Gran Buenos Aires y yo decidí ir a pasear por Plaza Serrano. Es decir Plazoleta Julio Cortázar, ubicada en el barrio Palermo Soho.
Los días domingos hay feria artesanal y de diseño allí. Es un lugar soñado y queda a pocas cuadras del depto. donde me alojo cuando voy a CABA.
Todo a pedir de boca.
Llego feliz y encuentro la zona de juegos de la plazoleta repleta de niños y niñas jugando felices ante la atenta mirada de papis, mamis, tías o quien fuera la persona adulta que acompañaba.
En un banco, un hombre dormía cubierto con frazadas y al abrigo del sol. Adultos y adultas mayores caminando lentamente, jóvenes, mucha gente paseando y ante mi inmensa sorpresa...
¡Nadie, pero nadie, estaba pendiente de su teléfono celular!
Los y las responsables de los niños y niñas se ocupaban de charlar entre sí mientras pispeaban que todo estuviera bien en los juegos, las personas que caminaban o estaban sentadas se miraban y charlaban, los puestos de la preciosa feria, atiborrados de gentes husmeando, comprando, conversando con los artesanos y artesanas...
¡No existían los teléfonos celulares en ese domingo soleado y soñado!...
Pensé que despertaría de pronto, pensé que era "Argentina año verde", pensé que lo mejor sería registrar esos instantes por si solo fuera una ilusión surrealista y entonces...
¡Me di cuenta de que había dejado mi cámara fotográfica en el departamento de mi amiga!
Lo dicho...el día que lluevan fideos...¡Yo salgo con la cuchara!
Gracias por pasar. Hasta el viernes próximo, o hasta cuando gusten volver.
Esa Musiquita en el recuerdo
Acá no zafás:
(por eso me hice “bloggera”, para publicarme...entrega Nº487 de la suelta de mis letritas)
Como si fuera viento
Algunas veces
como si fuera viento
arraso con todo
lo que a mi paso encuentro
Otras,
soy suave brisa
cuando me das tu tiempo
en tiernas caricias.
Pero...
de vez en cuando
soy calma chicha
soy calma chicha
nada me apasiona
nada me moviliza.
En ocasiones
huracán
me arrollan las pasiones
huracán
me arrollan las pasiones
como un vendaval
Un día viento norte
voy dando calor
con mi mano amiga
y el abrazo protector
Cuando me lastiman
soy viento del sur
-gélida y helada-
me ven hacer...
me ven hacer...
aunque llore en secreto
mi doliente Ser
A veces brisa
otras remolino
soplando del norte,
del sur...
del este...
fluyen mis emociones,
según el tiempo,
bajo los influjos
del dios Eolo,
Señor de los vientos