Tampoco me importa el mío
¡Qué bien arranca, para mi, este 2018! Finalmente luego de dos años de reclamos, de no poder salir a mi hermoso jardín del fondo de casa, de despertarme de madrugada por los potentes ladridos de la jauría de mis malos vecinos, de tener que salir a socorrer a nuestros gatitos, que asustados por esos 4 canes, no se atrevían a cruzar por el patio y muchos otros desvelos más...¡finalmente se han ido! Ayer fue mi primer día de sosiego. Feliz, abrí y cerré montones de veces la puerta que da hacia el fondo tan solo por el placer de poder ver mi parque, de asombrarme ante el silencio, de respirar el aire de mi propio patio, lo cual estuvo vedado para mi, mi familia y visitantes, por estos dos últimos años. Apenas sentían la llave dar vueltas, en la cerradura de mi puerta, se abalanzaban sobre el cerco y no dejaban de ladrar y mostrarnos los dientes hasta que entrábamos de nuevo al interior de mi casa. Verdaderamente fue un calvario y, como en un par de oportunidades compartí con los lectores esta odisea, hoy siento la necesidad de contarles la buena nueva.
Es de esperar que ahora los dueños de la vivienda, quienes fueron mis vecinos por 26 años, alquilen la casa a mejores personas y gente más comprometida con el vecindario. Mejores personas, en definitiva, que Juan Pablo Bello y su mujer que nunca tuvieron siquiera un mínimo gesto para reparar el daño emocional que nos han ocasionado a mi y a mi hiji Agustina.
Quienes leen este espacio desde hace tiempo, saben como masacraron a nuestro gatito Tomi, ante mis ojos horrorizados. (Publicación del 25/12/2015 "El cielo de los gatitos")
Y quiero aclarar que, los malos vecinos, ambos son profesionales, de hecho a él le otorgaron un cargo político como "director de provincial de patrimonio cultural"...¡Otro invento de esta gestión del gobierno de mi provincia para acomodar aliados! Como dice el dicho:
"Dime con quien andas, y te diré quien eres"
En fin, solo lo digo, porque los seres humanos tendemos a presuponer...a etiquetar...a desconfiar, según la clase social, el dinero que se posee, o los estudios entre otras cuestiones.
Como sea, se han ido con sus 4 canes...espero que algo hayan podido pensar en estos dos años, y adondequiera que vayan, se ocupen de conseguir una casa con muros altos y "ciegos" para que los animales no tengan visión de los patios circundantes.
Disculpen estas letritas tan personales pero necesitaba decirlo en voz alta para tener la certeza de que es un hecho. Puedo escribir ahora de corrido, o leer, sin desconcentrarme ni una sola vez, por los ladridos de la jauría, cada vez que nuestros gatitos atraviesan el jardín.
Gracias por pasar por aquí. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? Hasta el viernes próximo. Buena vida y BUENA VIBRA.
Frases para pensar:
NOTA: Para seguir con los tópicos, se me ocurrió buscar frases de "vecinos"
“Un vallado hace buenos vecinos”
Robert Frost
“Quien tiene tejado de vidrio, no tire piedras al de su vecino.”
Proverbio
“La conciencia, amigo, es uno de esos bastones que todo el mundo coge para apalear a su vecino, pero que nunca nadie hace servir para sí mismo.”
Honoré de Balzac
“Al comprar una casa, piensa en el vecino que adquirirás con ella.”
Proverbio
Acá no zafás:
(por eso me hice “bloggera”, para publicarme... ¡así que leé la entrega Nº 264 de la suelta de mis letritas)
Abandonada
No
logro comprender aún porque te fuiste.
Repaso
los hechos del día, busco detalles en mi mente…mi cabeza va a estallar.
¿Qué
fue lo que te alentó a alejarte? Saliste decidido, como siempre, te
saludé como cada mañana y entré a desayunar. Lo de siempre también: Jugo
exprimido, tostadas untadas con queso crema (2) y un cortado en jarro grande.
Luego,
las cotidianeidades mías. Revisar los mail, leer los titulares, ducharme,
mi hora de gimnasio, mas dos horas de trabajo. Estuve muy concentrada esta
mañana, trabajando en el capítulo final de mi nueva novela, que –ironías del
destino- se va a titular Abandonada…No, claro que no hablo de este abandono
reciente, hablo de los abandonos de la vida en general. Y en ese punto estaba,
cuando me di cuenta que tenía hambre, que eran las 13:30 hs y vos no te
habías anunciado de ninguna manera. Para esa hora siempre volvías y
almorzábamos juntos.
Entonces,
comencé a buscarte…Mentalmente en principio. Intentando saber que pude haber
hecho mal, intentando recordar los hechos puntuales de la última semana…Recordé
mi enojo por el desastre que habías hecho en el baño, dos días atrás y tu
mirada silenciosa ante mis gritos desaforados…recordé el lunes, cuando
regresaste de la calle todo embarrado y volví a gritar como loca…y otra
vez tu mirada silenciosa.
También
repasé mentalmente nuestros momentos felices, los paseos por el parque. Las
noches acurrucados cerquita de los leños encendidos…Y esa conexión tan nuestra,
tan fuerte, que presumía yo al menos y tal parece, por estos aconteceres recientes, mi presunción ha sido erronea…
Tomé
un té a modo de merienda. No pude probar bocado.
Pensé
que una foto podría ayudarme a encontrarte…Busqué la última, esa que nos
sacamos hace apenas una semana, cuando estrenamos la nueva reposera juntitos, felices y en medio de arrumacos.
Y
lloré….no pude evitarlo, a medida que pasaban las horas mi angustia se
convertía en nudo en la garganta, dolor de estómago y lágrimas resbaladizas… Me
quedé dormida justamente en la nueva reposera…Soñé que llegabas y te abalanzabas sobre mi, que yo preparaba tu comida preferida y luego salíamos los dos, felices, rumbo al parque.
Y
ahora que las campanadas de la iglesia acaban de despertarme, me doy cuenta de que afuera,
en el jardín hay sonido de pisadas sobre las hojas secas, corro hacia la
ventana y te veo, cansado…asustado…tocando la puerta.
¡Volviste!
Ya no me importa donde puedas haber estado, ya no me importa porque te alejaste
tanto, ya no me importa siquiera que estés todo sucio. Te abrazo, y tu
mirada silenciosa de siempre y tus orejitas caídas y esa carita de pedir perdón
por la travesura.
Y
me río como loca, y te digo:-¡Adentro Totó! Ya vamos a hablar de esto.
Ahora, mejor que comas la rica polenta que te preparé y ese huesito de ayer que
aún te espera en el plato. Y por cierto, te voy a dar agua fresquita y luego un
buen baño.
Ya
duerme Totó acurrucado y tierno en su almohadón, al pie de mi cama. Repaso el
capítulo final de “Abandonada” y apago la luz.
La verdad, entiendo a la gente que ama a los perros, pero me parece de muy mala educación que no se den cuenta, o no quieran reconocer, lo mucho que, en ocasiones, molestan y perjudican sus mascotas a los vecinos. Me alegro mucho de que se hayan marchado. Que tengan buen viaje...Saludos.
ResponderBorrarRecuperar tu jardín trasero y empezar el año con la marcha de tus incómodos y poco empaticos vecinos y sus canes deberías considerarlo un buen augurio para este 2018, querida, Lu.
ResponderBorrarQué larga fue la batalla, pero al final ganaste, y ya tienes de nuevo tu tranquilidad y tu sosiego. A lo mejor los nuevos vecinos son todo lo contrario, gente empática, interesante y divertida.
Desde luego el Proverbio vecinal de tus frases vecinales es una verdad que nadie debería ignorar.
Y vamos al relato, Lu, ¡cómo me engañaste...! Hasta el final vi un tipo con gabardina embarrado que volvía a tu jardín. Hasta pensé que había tenido un accidente. Mi mente calenturienta iba más deprisa que la suelta de tus letritas.
Me encantó la manera de narrarlo, Lu, y el que pudiera pensar en un amante humano y no en un amado perro hasta el mismísimo giro final.
Podrías plantar alguna planta o arbusto para celebrar que has recuperado del todo tu jardín trasero.
Un abrazo,
tesa, linda
ResponderBorrar¡Qué bueno que te hayas creído que era un hombre! He leído , corregido, vuelto a leer y corregir este texto, hasta que me pareció que estaba logrado "el engaño" para los lectores.
Al menos contigo, funcionó.
Un gran abrazo
Ahh! Respecto a mi jardín, sigue creciendo el pasto, no cesa la lluvia y no se puede cortar en estas condiciones, Pero ¡ya no importa! Cuando mejore el tiempo, vendrá alguien a cortarlo y yo pondré bellos plantines.
no sabes como me alegro Lu de tu nueva situacion al verte libre de tales seres , en lo que me toca despues de una decada a unos de la planta les dio por ponerse a la mirilla y desde ahi no cejan en su empeño de salir estar hacerse presentes son un caso que como bien dices se convierte en calvario particular ,una catarsis mental a veces poco grata de llevar espero lo que te ha pasado a ti se vallan o al menos tengan otras cosas mas que hacer que vigilar lo invigilable ,me es grato saber que todo se supera...Lu y brindo porque los nuevos sean por lo menos normales osea que esten a lo suyo vive y dejar vivir ,te invito a leer mi nuevo post que publique y me agradaria te gustara , de nuevo felicitaciones y mis saludos con afecto . jr.
ResponderBorrarJosé, gracias por pasar por aquí una vez más.
ResponderBorrarEspero que también vos tengas la suerte de que se vayan esos "chusmas" que te han tocado de vecinos.
Un abrazo
Hola, ya llegué. Qué bueno que esos horribles perros se hayan ido a hacer renegar a otros vecino, recuerdo cuántas veces me contaste que te hacían la vida imposible y a pesar de tus desvelos, nadie movió un dedo a nivel municipal para solucionar tu problema, enhorabuena que todo haya terminado así y espero que tus nuevos vecinos sean más considerados.
ResponderBorrarMe atrapaste con el cuentito. ¡Imaginé que era un humano! Muy buena la forma de llevarlo, besos Evy.