jueves, 11 de octubre de 2012

Cenifrienta

Tampoco me importa el mío
Y por eso hoy voy a decir que sigo con mis Breves momentos - al igual que mi libro- o tal vez me convertí en mi libro....En fin. Lo que me queda claro es que ,ahora sí, no puedo caminar y masticar chicles ... ¡NO puedo con todo! perdí mi capacidad de organización, pero a decir verdad...¡no me importa!. Ahora tengo claro que elijo hacer menos, pero no tener que andar corriendo, y elijo también tener tiempo para practicar alpedismo. La realidad es que crecí en la época del HAY QUE HACER...¿y qué pasa si decido NO HACER? Es que el no hacer, implica otra serie de "HACERES", por ejemplo, mirar una novela pedorra en tv, mirar por la ventana, jugar solitario spider (o símil)  hacer aeróbicos, estiramiento, y relajar, leer lo que sea, o nada, navegar por internet, armar la mochila y salir en cualquier momento adonde sea...Bueno pues, es todo lo que ahora no puedo. Mi libro, sigue demandándome tiempo, la obra para el MAF, también, el calendario para mi madre, ni hablar, aún no logro enviarlo. Por otro lado, derechos de autor -aun no no voy a registrar mi firma-más los cuentos y poemas para enviar a Cultura de la Provincia, a un llamado que casi está cerrando y aún no termino con ello. 
A propósito de las actividades culturales, me parece oportuno contar que van a editar antologías de autores fueguinos, a saber una de cuentos infantiles, otra de cuentos para adultos y un poemario...¡Que buena noticia para todos los que desparramamos letritas por la web, o en cartas, o para los amigos y amigas! Creo que cabe destacar entonces esta nueva oportunidad que se nos brinda a los escritores fueguinos. Cada quien podrá tomarla, o dejarla, o criticarla en los pasillos sin hacer nada...Pues bien, yo la tomo, y ésta si es una actividad que me gusta - y mucho- más allá del tiempo que me insume preparar todo para cumplimentar los requisitos de la presentación.
Agrego que también desde la Secretaría de cultura de la provincia hay convocatoria para músicos, y otra para adolescentes de entre 14 y 19 años...Entonces, vale el dicho: "El movimiento se demuestra andando"...O si quieren, también es de aplicación  "El que se equivoca, es porque hace...el que nada hace de nada puede equivocarse"...
Como siempre, gracias por leer mi blog. Espero opiniones, críticas y halagos también. ¿Vale? ¡Hasta el jueves próximo! Buena vida
 Lu
Acá no zafás:
(para eso  me hice “bloggera”, para publicarme...¡así que leé la entrega Nº 80 de la suelta de mis letritas!) 
Nota: El relato que sigue, surgió en un ejercicio de taller, en 2010. Hoy lo rescato porque,si bien no puedo hacer juicio sobre sus "condiciones literarias", sí puedo decir que me parece muy chistosa esta versión aggiornada y patagónica de Cenicienta...¡Que la disfruten!
Cenifrienta
Es la hora de los presagios y el viento patagónico, más que viento, sopla que te sopla. Chapas que golpean escandalosamente entre si, y la bella niña de dorada cabellera ensortijada, llora sobre el lecho de su madre moribunda.
A lo lejos, se oye al padre, cantando una melodía que lejos de ser una marcha fúnebre, suena más bien a un rock del Rey
Y dice entonces la madre, en una letanía que parece un conjuro final: "Niña mía, la otra, vendrá y dormirá con tu padre en esta cama...no habrá manera de impedirlo, pero lo que podrá evitarse, es que se entreguen a los placeres del sexo y se revuelquen en mi cama como dos desenfrenados amantes. Solamente con tu ayuda mi pequeña niña podremos lograrlo. Para ello te daré señales...Y vendrán también sus dos desgraciadas hijas, que intentarán ser las preferidas de tu padre. Deberás estar muy atenta, daré 3 golpes en...en...en....
¡¡¡¡Mami, mamitaaaaa, mamacitaaaa!!! No te mueras sin decirme adonde vas; gritó la rubia niña sacudiendo alocadamente a su madre, que ya había exhalado un último suspiro, dejando su cuerpo inerte al tiempo que una gaviota posábase en unos enredados tamariscos.
Enterrada que fue la mujer, y a pocos días de tan triste episodio, el viudo -pescador de oficio- presentóse en el hogar, con 3 mujeres bulliciosas, regordetas y arrogantes.
Hijita querida, (dijo impostando la voz, tratando de darle quizás un paternal y sentido tono de afecto), debo hacerme a la mar, para así poder pagar la mejor educación para ti, la que te mereces mi niña, la que hubiese querido tu madre."
-Pero padre; yo no quiero que me deje aquí solita..
-No te quedarás sola hija mía, para ello y a pesar del profundo dolor que guardo en mi corazón por la partida de tu madre, vivirán aquí tu nueva mamita y sus dos hijas, que de aquí en más, serán tus hermanas.
-Pero padre..., en mi cuarto hay solo dos camas....
-He pensado en ello, podrás dormir en el camastro junto al fregadero, pues no mereces dormir en el suelo...
Así que, esa noche, la pobre niña, atrapada sin salida, acurrucada en el catre instalado junto al lavarropas, escuchó a sus repentinas hermanas riendo y gritando:
"Ahora que sos Cenifrienta a nosotras tu estufa nos calienta"
Alguien tiene que ceder, se dijo, mientras frías y saladas lágrimas corrían por sus mejillas y fue entonces cuando alcanzó a oír la voz lujuriosa de su padre, invitando a meterse entre las sábanas a Paloma, su nueva mujer, tal cual él la llamaba...
En esa misma cama en la que había dormido con su madre hasta hacía apenas unas semanas atrás.
Y es ahora mismo el tiempo en que esta historia se pone más interesante, a punto que muchos de vosotros, no os creeréis lo que relato, pero debo deciros que es cierto, que justo antes de lograr satisfacer sus deseos carnales, se oyeron fuertes golpes en la puerta y la doncella vio a su padre corriendo en paños menores para atender ese urgente llamado.
Al abrir, lo único que entró a la casa fue una helada ráfaga a la vez que los golpes comenzaron en la ventana. Hacia allí corrieron las hermanas, que con gran sorpresa y no sin temor, divisaron una gaviota, colgada de una rama, al tiempo que en las chapas del techo, los golpes retumbaban.
¡El revuelo que se armó! Las intrusas gemían aterradas, Paloma golpeaba su despeinada cabeza contra el espejo mientras la piel se le erizaba, el padre en calzones de frisa intentaba calmarlas, corriendo en círculos alrededor de la cama...
¿Y Cenifrienta?
Escapaba por la puerta de servicio, en silencio y relajada, a encontrarse con el hijo del dueño de la flota de pesqueros, que con los brazos abiertos y un tapado de piel sintética, la esperaba.
¿Y la gaviota?
Apoyada en el marco de la ventana, cantaba una extraña melodía que más o menos así sonaba:
SCABA BADI BIDU
DUBI BIDU BIDÉ
QUE SE QUEDEN EN LA CASA
QUE PRONTO SERÁ INCENDIADA
SE EQUIVOCÓ LA PALOMA
SE EQUIVOCABA, SE EQUIVOCABA...

3 comentarios:

  1. Hola, dicen por ahí que quien mucho abarca`poco aprieta. Espero que puedas apretar todo lo que te plazca, (en el pícaro sentido obviamente) pero te recomiendo un poco de calma porque si no, vas a poner tu firma en la antología, tu correcciones en el calendario y por último, el libro irá a concurso en cultura.
    Dicho el consejo,te cuento que pese a conocer tu relato me dado una linda panzada de risa con tus dislates(fijate qué castiza estoy) algo muy saludable para irse a la cama con muy buen humor, gracias amiga,besos y calma, Evy

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  2. LU, YA MEJOR, TE CUENTO QUE ME ALLEGRO LO QUE DECIS EN LA INTRO, ESO DE PRACTICAR EL ALPEDISMO.
    LOS DEMAS DATOS QUE DAS, INTERESANTES.............
    EL TEXTO, MEDIO EXTRAÑO, PERO DIVERTIDO, Y LOCO, COMO MUCHOS OTROS QUE PUBLICAS.
    BESOS.
    LA UBALDON

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  3. Lu, como siempre me entretengo leyendote, sos creativa y simpática. Te quiero, Sil

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