Tampoco me importa el mío
En esta "intro" seré muy breve por motivos varios que, todos juntos, hacen este caos que no me permite ordenar mis pensamientos.
El invierno se aproxima a pasos agigantados y el verano se olvidó de pasar por "el sur del sur", los grises me acobardan y me quitan energía.
Y no estoy hablando de un par de días grises... estoy hablando de casi tres meses con continuidad de grises, lluvias y vientos.
Primer semana de marzo y por acá ¡ya está neviscando! Y lo que más me inquieta a estas alturas es que creo, tal como viene la economía en este país, tendré que quedarme por estos pagos a pasar el invierno completo.
En fin, que tampoco tengo un blog para hablar del clima y de como me afecta. Lo que en verdad quiero contar es que, para mí, el hecho de ir al cine es todo un acontecimiento.
Por más que pueda ver las pelis que se me ocurran, tranqui en casa, desde una plataforma, por caso Netflix o Play.cine.ar, a mi me fascina el hecho social de ir al cine. Y si es "de barrio" mucho mejor. De hecho en Ushuaia hay un complejo Sunstar y el antiguo cine Packewaia cuyas instalaciones son lo más parecido a un galpón agiornado y convertido en cine.
Adivinen; ¿a cuál voy cuando traen buenas pelis?...
Tema para otra oportunidad: las pocas chances de ver buenos films que por acá tenemos.
Lo cierto es que fui en estos días a ver "Green Book". Me gustó la peli, que la sentí todo el tiempo como una comedia más que como un drama, en algún momento se me hizo "larga", me di cuenta cuando necesité mirar la hora, y luego cuando, por fin, llegaba el final pensé que allí se precipitaría una escena terrible, pues durante todo el transcurso del film no logré encuadrarlo en el género con que lo promocionan, pero no sucedió.
El tema de discriminación racial está tratado de un modo demasiado liviano y bastante alejado de lo que en verdad pasaba en los 60 en Estados Unidos en ese aspecto.
En fin, que me perdonen los cinéfilos, los que comprenden y analizan este arte, los de "La Academia", pero yo, que tan solo soy Profesora de Nivel Inicial -jubilada- escritora amateur, mamá y ama de casa, no comprendo cómo es que "Green Book" ganó el Oscar a la mejor película.
Y fui también a ver la película argentina "La misma sangre". Un drama sin lugar a dudas y con total suspenso. Me tuvo las casi dos horas que dura, aferrada a la butaca y conteniendo el aliento. Me encantó y le pongo "5 Lu" (en escala de 0 a 5) a la actuación de Oscar Martínez. Siempre, no importa el rol que le toque jugar, me resulta totalmente creíble. En esta ocasión, si lo hubiera cruzado por la calle al salir del cine, creo que le hubiera gritado ¡Hijo de putaaaaaa! Digo, para graficar cuán creíble me resultó su personaje.
Obviamente y respecto al film, no a la actuación de Martínez, tampoco en este caso coincido con la mayoría de los críticos.
Pero ya saben, yo del séptimo arte no soy entendida, sólo opino desde los sentimientos que me generaron ambos films que vi por estos días.
Y...¡Vaya brevedad la mía! Disculpen, había pensado que esta vez no tendría demasiadas palabras ni conceptos para volcar aquí.
El invierno se aproxima a pasos agigantados y el verano se olvidó de pasar por "el sur del sur", los grises me acobardan y me quitan energía.
Y no estoy hablando de un par de días grises... estoy hablando de casi tres meses con continuidad de grises, lluvias y vientos.
Primer semana de marzo y por acá ¡ya está neviscando! Y lo que más me inquieta a estas alturas es que creo, tal como viene la economía en este país, tendré que quedarme por estos pagos a pasar el invierno completo.
En fin, que tampoco tengo un blog para hablar del clima y de como me afecta. Lo que en verdad quiero contar es que, para mí, el hecho de ir al cine es todo un acontecimiento.
Por más que pueda ver las pelis que se me ocurran, tranqui en casa, desde una plataforma, por caso Netflix o Play.cine.ar, a mi me fascina el hecho social de ir al cine. Y si es "de barrio" mucho mejor. De hecho en Ushuaia hay un complejo Sunstar y el antiguo cine Packewaia cuyas instalaciones son lo más parecido a un galpón agiornado y convertido en cine.
Adivinen; ¿a cuál voy cuando traen buenas pelis?...
Tema para otra oportunidad: las pocas chances de ver buenos films que por acá tenemos.
Lo cierto es que fui en estos días a ver "Green Book". Me gustó la peli, que la sentí todo el tiempo como una comedia más que como un drama, en algún momento se me hizo "larga", me di cuenta cuando necesité mirar la hora, y luego cuando, por fin, llegaba el final pensé que allí se precipitaría una escena terrible, pues durante todo el transcurso del film no logré encuadrarlo en el género con que lo promocionan, pero no sucedió.
El tema de discriminación racial está tratado de un modo demasiado liviano y bastante alejado de lo que en verdad pasaba en los 60 en Estados Unidos en ese aspecto.
En fin, que me perdonen los cinéfilos, los que comprenden y analizan este arte, los de "La Academia", pero yo, que tan solo soy Profesora de Nivel Inicial -jubilada- escritora amateur, mamá y ama de casa, no comprendo cómo es que "Green Book" ganó el Oscar a la mejor película.
Y fui también a ver la película argentina "La misma sangre". Un drama sin lugar a dudas y con total suspenso. Me tuvo las casi dos horas que dura, aferrada a la butaca y conteniendo el aliento. Me encantó y le pongo "5 Lu" (en escala de 0 a 5) a la actuación de Oscar Martínez. Siempre, no importa el rol que le toque jugar, me resulta totalmente creíble. En esta ocasión, si lo hubiera cruzado por la calle al salir del cine, creo que le hubiera gritado ¡Hijo de putaaaaaa! Digo, para graficar cuán creíble me resultó su personaje.
Obviamente y respecto al film, no a la actuación de Martínez, tampoco en este caso coincido con la mayoría de los críticos.
Pero ya saben, yo del séptimo arte no soy entendida, sólo opino desde los sentimientos que me generaron ambos films que vi por estos días.
Y...¡Vaya brevedad la mía! Disculpen, había pensado que esta vez no tendría demasiadas palabras ni conceptos para volcar aquí.
Gracias por pasar. Espero opiniones, críticas y halagos también ¿Vale? Hasta el viernes próximo. Buena vida y BUENA VIBRA.
Frases: hoy paso de las frases.
Aprovecho, en todo caso, el espacio para decir una sola y dedicada a mi amiga Eva, la más antigua y consecuente comentarista de este blog
¡Que tu día sea maravilloso y disfrutes de tu año más de experiencia!
Acá no zafás:
(por eso me hice “bloggera”, para publicarme... ¡así que leé la entrega Nº 310 de la suelta de mis letritas!)
Amantes
Si me orillas
y
te orillo
llegaremos
a nuestro centro
entonces
en ese medio
nos seremos
nos abrazaremos
y
en el ardor de nuestro fuego
nos consumiremos
siendo nosotros
para volver a
nuestras orillas
arrojados por la oleada
mansos
flacos
húmedos
amantes
y
repitiendo el ciclo
nuevamente nos seremos.
Hola Lucía, gracias por dedicarme tu espacio de frases, ha sido realmente un día pleno, rodeada de mis afectos familiares y de los amigos, que tengo cerca. Regalitos, brindis, torta con una sola velita y mucho cariño de parte de mi troupe de facebook. Y por supuesto tu llamado.
ResponderBorrarYo tampoco soy una experta en cinematografía, por eso sigo los consejos de mi hijo que estudió bastante el tema y ve muy buen cine, sobre todo en Netflix, yo soy más fan del cine argentino y veo mucho Cinear. No tenía idea de qué película había ganado el Oscar, y vi algunos avances de la argentina que mencionas. Voy a buscarla para poder compartir opiniones, te recomiendo, (tal vez ya la viste) «Mi obra de arte» en Netflix, con dos actores argentinos de primera línea, Franchela y Brandoni.
Me encantó el poema, muy buena esa forma de manejar los verbos, besos, Evy
Empiezp por el final, que hermoso y rítmico describiste ese ciclo de amantes, Lu, que se buscan, se centran, se consumen para orillarse de nuevo y volver a empezar. Todas deseamos que con la misma intensidad, o al menos que no se convierta en rutina. Me ha encantado.
ResponderBorrarFelicidades a Evy, que siempre la encuentro por aquí y leo con atención sus comentarios.
Y por último, me temo que tienes razón ante "Green Book" ya recibió algunas criticas con tu mismo argumento, demasiado blanda, demasiada comedia, para hablar de la discriminación racial tan intensa en los estados del Sur de EE UU en la época que retrata.
No la he visto, sólo un largo trailer que pasaron en un programa que sigo "Días de cine" y ya me dio esa impresión. Y eso que soy fan de que en las tragedias se incluya el humor.
Pero como tú dices, parece más una comedia que pasa del drama.
No conozco la peli argentina, pero estaré al tanto.
Mis gustos cinéfilos y literarios no sólo no coinciden con las "buenas críticas" sino que tampoco con la mayoría de los consumidores, así que no suelo recomendar nada de lo que me gusta a mí. Salvo a mi hijo, que en eso conectamos.
Por acá se nos adelantó la primavera, Lu, ojalá pudiéramos intercambiar nuestros muchos días soleados por un poco de lluvia, que nos hace falta, ha llovido solo un día en todo febrero y lo que llevamos de marzo, y es que el cambio climático está ya aquí para volvernos locos a todos.
Un abrazo, Lu. Mímate pese a los grises.
A Tesa, muchas gracias por tu saludo, yo también te leo con mucho gusto y coincidimos a veces en muchos temas, un abrazo argentino desde la ciudad de La Plata.
ResponderBorrarQuerida amiga, vere si puedo encontrar esa pelicula argentina, pinta para bueno, me gusto Green Book, porque estaba ambientada en una historia real y porque me encanta la musica, pero quiza algo falto, un abrazito!
ResponderBorrar